Es el espacio terapeutico de intimidad, del uno a uno, en que trabajar las necesidades específicas de cada persona en el momento presente.

Es un trabajo que permite ir descubriendo las formas en que cada uno se dificulta la vida, ver como se ha ido olvidando de si.

En que ir trabajando la toma de conciencia, la responsabilidad de la propia vida, la presencia… y desde aquí poder navegar en las dificultades, en el autoconocimiento, en la propia forma de ver y vivir la vida en vivo y en directo. Y será de esa forma en la que, a través del acompañamiento terapeutico, ir descubriendo las propias necesidades, las herramientas que cada uno dispone para poder satisfacerse en este encuentro con la vida.

Como terapeuta acompaño en este camino de toma de conciencia como si de un faro se tratase, estando ahi, presente, señalando las trampas que cada uno se hace en su camino, ayudando a descubrir los patrones que nos dificultan la vida, que se han ido repitiendo y que pueden derivar en ansiedad, estres, depresión, insatisfacción vital, dificultades en la sexualidad, dificultades en las relaciones… Ir identificandolos, tomando conciencia y, desde la experiencia vivir nuevas formas de ser.

Trabajo ofreciendo una mirada que permita a la persona integrar su ser a nivel emocional, intelectual, instintivo y espiritual. En este proceso de descubrimiento, aceptación y ejercicio del propio ser. Entendiendo el propio cuerpo, las emociones, descubriendo las trampas que cada uno se hace a si mismo para no vivir una vida plena y ofreciendo situaciones reparadoras y propuestas desde las cuales reconstruir el vínculo de amor interno.

Es un trabajo para todas las personas que busquen tener un mayor conocimiento de si, redescubrir sus habilidades, su potencial… tanto como para abordar las dificultades, traumas, bloqueos, perdida de sentido vital, insatisfacción, sufirmiento, duelo, bloqueos creativos, dificultades familiares…